martes, 23 de octubre de 2012

“ENTRA EN MI VIDA”

CANASTA DE RELATOS YURECUARENSES


Estimados amigos, en esta semana nos complacemos en presentar el bonito relato del joven Edgar Jesús García Alcalá. Quien es el escritor número 4 de esta sección… Para que lo ubiquen es el hijo de Chuy el de los discos o casetes de las cuatro esquinas, yo le veo mucho talento como escritor, se la dedica una mujer llamada Michell, ojalá ella la pueda leer porque se la escribió con mucho amor...



“ENTRA EN MI VIDA”

Relato escrito por: Edgar Jesús García Alcalá.

Te conocí un 11 de julio, mientras un amigo y yo paseábamos por la plaza del pueblo. Estábamos a pase y pase por donde estabas, en eso, me sonreíste y sentí que mi vida se iluminó. ¡Me gustaste tanto desde el primer momento en que te conocí! Así que aprovechaba cualquier pretexto para pasar por la casa donde estabas de visita, pues vives en Estados Unidos, pero cuando te volví a ver, cobré valor para hablarte y platicar contigo.

La verdad solo quería conocerte más, que fueras mi amiga, con eso me conformaba, te invité a una segunda cita y aceptaste, yo me sentí feliz.

A los cuatro días, fuiste a la tienda de mi papá, estábamos jugando a las “cosquillas” y peleando, de juego, en eso te robé un enorme beso, fue ahí donde me di cuenta que no solo quería que fueras mi amiga, sino mi novia, porque en mi estómago sentí algo maravilloso que nunca había sentido por alguien. Esa misma tarde nos vimos en un establo, en compañía de su hermana y otro joven, platicamos y me la pasé genial.

Cada día iba creciendo más y más este amor que sentía por ti.

Sabes, casi a diario peleábamos, como de juego, pero creo que a veces era en serio, eres muy enojoncita, pero reconozco que es por mi culpa, porque me encantaba hacerte enojar, tu carita es genial cuando te enojas y te contentaba con un beso largo, porque no te besaba muy seguido, así que procuraba que ese beso fuera largo, largo, porque me llevaba hasta las estrellas.

Entonces pasaron los días y fue el 16 de julio, cuando decidí confesarte que te amaba. Recuerdo que te invité al rancho, te compré una rosa y un CD y fuimos, estuvimos conversando, en eso te hice enojar, nos peleamos y me rechazaste, aproveché a ir por la rosa y el CD y puse el disco, la canción era “Entra en mi vida” del grupo “Sin Bandera”, me acerqué a ti por la espalda, te di la rosa mientras la canción sonaba y te dije:- “Esta rosa es para la niña más linda del mundo Michell, te amo” te volteaste, me diste un beso y me contestaste: “Te quiero”, me diste aquél beso tan tierno, que se me salió una lágrima de felicidad y es que en tan poco tiempo experimenté tantas cosas que nunca había sentido por ninguna mujer y no creo pasar esas aventuras, sabes tú me has hecho conocer el verdadero amor y el cielo.

Tú regresarías a Estados Unidos el día 21, ya faltaban pocos días, pensé en prepárate una sorpresa para que nunca te olvidaras de mí, esa sorpresa fue un 18 de ese mismo mes, que por cierto salió mejor de lo que planeé y nunca voy a olvidar esos momentos.

Y pues llegó el día en que te ibas a marchar y fui a las seis de la mañana a despedirte, me pediste que me cuidara mucho, que ibas a regresar para estar conmigo.

Pasaron los días, comenzaron los problemas, los celos, etc. Recuerdo que te compuse una canción y hasta me hice un tatuaje del lado de mi corazón con tu nombre.

Lamentablemente, pocos días después terminamos, reconozco que fui yo quién cometió el error y tú no quieres saber nada de mí. Sé que me quieres como yo te quiero, sé que quizás nunca regresarás, pero quiero que sepas que aún te sigo amando… ¡Por favor Michell entra en mi vida de nuevo, que yo te sigo esperando!...

¡Esperen más relatos, porque nuevos escritores y escritoras están surgiendo, con muchas sorpresas! ¡Hasta la próxima!

martes, 16 de octubre de 2012

MI ILUSIÓN, MI FANTASÍA Y MI REALIDAD.

Es un Placer presentar a Marian Jacqelin como la nueva escritora de la Canasta de Relatos Yurecuarenses ella es una estudiante de 19 años de la Ribera Jal.




Escrito por: Marian Jacqelin Navarro Silva



Aún recuerdo como te conocí. Todo empezó con una simple mirada, esa mirada que cambió toda mi vida y habló sin decir palabras. Pasó el tiempo, recuerdo que nos empezamos a saludar por el chat, fuimos amigos pero a la vez…Un amor escondido, a través de la computadora. Siguió pasando el tiempo hasta que por fin pudimos ser novios.

El día que llegaste a mi vida, me dije a mi misma ¡Al fin te encontré! Completamente cambiaste mi existir, creí tenerlo todo…Poco a poco pasaban los días pero rápidamente me enamoré.

En esos instantes de felicidad me sentía como nunca me he sentido, llena de tranquilidad y de mucho cariño, te volviste mi paz, mi ángel, que me elevó hasta el cielo, tu forma de tratarme fue la trampa, poco a poco fui cayendo en tus redes, solo sé que mi motivo eras tu, siempre pensando en ti…

Nunca imaginé mi vida sin ti hasta que llegó tristemente el día en que nos dijimos adiós, no sé si te marchaste o te deje escapar, solo me di cuenta que en ese momento sentí que el mundo caía sobre mí. Llegaron a mi mente todos los momentos que pasamos en los que me decías te amo y me prometías amor eterno. Un día dijiste que jamás harías algo que a mi me lastimara, esa ternura con la que me mirabas me hacía sentir que eras sincero, esa noche en la cual nos separamos ninguno de los dos trató de echarse para atrás…El silencio ganó terreno, salía sobrando el orgullo y ninguno de los dos retrocedió, el dolor inmensamente se apoderó de mí, sentí la necesidad de extrañarte.

Me di cuenta en muy poco tiempo que no te afectó nuestro adiós, pues cuando menos pensé ya eras de alguien más, solo sé que me quedé con varias ilusiones y sueños anhelados junto a ti. No te puedo negar que me dolió saber que eras de alguien más. Fue imposible no sentir dolor porque te quise mucho y te di lo mejor de mí, sin embargo tú me has herido y lo haz hecho muy bien pero no te reprocho nada, no me arrepiento de nada, porque aunque recuerde cuando me decías que yo era tu princesa y de pronto se te olvidó, quiero que sepas que esos recuerdos me ayudan a no sentirme sola y recordarte de la mejor manera, a pesar de todo lo que sucedió no te guardo rencor, sino al contrario deseo que seas feliz y te encuentres bien , es este tiempo que ha pasado he aprendido a sonreír a pesar de mi sufrimiento porque ver a la persona que amas al lado de otra no es nada fácil.

El tiempo que estuvimos juntos, tu me hiciste feliz, hoy me alegro porque tu eres mi mundo y yo para ti un recuerdo. No estoy esperando tu regreso, tampoco voy aferrarme a ti, lo que vivimos ya fue su tiempo.

Hoy dejaré de pensar en ti, te dejaré en paz y solo te recordaré, quiero empezar una nueva etapa, me preocuparé por mí, olvidar que cuando más te necesité, me soltaste, contigo aprendí muchas cosas pero al caer mi final fue en caída libre me dejaste sola y olvidada, ni siquiera tuve tiempo para hacerme a la idea de asimilar que te había perdido y no estarías más a mi lado.

Te encontraste un nuevo amor, espero que seas feliz, que sigan adelante. El día que te hagan sufrir y te encuentres solo, piensa en mí, porque estaré contigo cuando triste estés. Yo no te puedo obligar a quererme si la felicidad, yo, no fui para ti, fue lo mejor que así te fueras, solo te deseo lo mejor y aunque me hunda en el sufrimiento de algo, sirvió mi dolor y mi condena, duele estar sin ti pero estoy contenta porque sé que eres feliz.

Después de ti, ya nada quedó, solo recuerdos , mientras tu estés aquí tan dentro de mí, no se me hará fácil volver a corresponder a alguien porque hay un cruel detalle, que después ti ya no pude amar. Este fuerte amor que siento, no me deja vivir, me hace sentir insegura hasta de mi misma a veces trato de no pensar en ti, a veces reniego del día en que llegaste a mí. De principio fue muy hermoso subir a lo mas alto, no estaba en mis planes pero me tomaste de tu mano, de repente así igual me soltaste… ¡Fue tan bonito vivir el momento! Pero mis alas no eran de verdad y aunque ahora llorando estoy no me arrepiento.

Siendo sincera ahora solamente me pregunto si en realidad te sabrán comprender y amarte como yo te amé...

Hoy comprendo que fue culpa mía dejar que el corazón te amara tanto, pues jamás pensé que para amar había un después.

Comenzaré mi vida normal, confiaré en que me volveré a enamorar de nuevo, esperar al tiempo, para que mis ilusiones y fantasías se conviertan en mi realidad.