lunes, 18 de julio de 2011

PORQUE TÚ ME ENSEÑASTE A AMAR

MI NUEVA HISTORIA:
¡AÚN PODEMOS SONREÍR!

ORIGINAL DE: FRANCISCO MURILLO MÉNDEZ.

CAPÍTULO 1: "PORQUE TÚ ME ENSEÑASTE A AMAR".

CD. DE MÉXICO 2011.
CRIT DEL TELETÓN.
Las instalaciones del CRIT Teletón son realmente sorprendentes, los colores que lo adornan invitan con animosidad a sonreír y a tener esperanza, por uno de los muchos pasillos van caminando Azucena y Álvaro, quienes llevan a la jovencita Alisa, su hija quien tiene Síndrome de Dawn a una de sus primeras terapias, atrás de ellos los sigue Carmenza, quien es hermana de Azucena. Al llegar hasta la zona de terapias, pues aparte Alisa, no puede moverse libremente y tiene que andar en silla de ruedas, el doctor Pineda los está esperando y Alisa le devuelve una hermosa sonrisa:
Dr. Pineda.- ¡Bienvenidos al CRIT México!
Azucena.- ¡Muchas gracias Dr. estamos muy emocionados de estar aquí por fin! pero con sentimientos encontrados.( Azucena se abraza de Álvaro y evita llorar abiertamente).
Álvaro.- ¡Mi amor, trata de controlarte, necesitamos darle mucho ánimo a nuestra Alisa!
Azucena.- Por más que quiero detenerme de pensar en lo que sigue no puedo Álvaro, ¡Nunca me he separado de nuestra hija por tanto tiempo y ahora lo tendremos que hacer! Pero sé que es muy necesario, pues en nuestro pueblo no hay instalaciones de un CRIT apropiadas para atenderla, en Yurécuaro Michoacán, nuestro Pueblo, aún no lo hay y es tan doloroso no poder hacer nada y cuando surge la oportunidad de hacer algo, tiene que ser bajo muchos sacrificios, como la separación.
Álvaro.- Desgraciadamente no podemos quedarnos en la CD. De México por mucho tiempo, pero lo que debe tranquilizarnos es que dejamos a nuestra pequeña Alisa en las mejores manos, en las de tu hermana Carmenza, confiamos en ella plenamente y sé que no nos defraudará.
El médico se acerca a la pequeña Alisa y la ve fijamente a los ojos:
Dr. Pineda.- ¡Hermosa jovencita! ¿Cómo te llamas?
Alisa trata de pronunciar su nombre, con mucha dificultad, apenas se entiende, pero ella vuelve a sonreír llena de alegría y ganas de vivir.
Carmenza.- Dr. esta niña preciosa es la alegría de la casa de la familia Vallarta, es una verdadera bendición para todos nosotros, déjeme platicarle que desde hoy una luz ha llegado a mi vida, y voy a hacer todo lo posible por hacer que brille más, mucho más.
Dr. Pineda.- Pues así será seguramente, ¡Allá viene Paola, una de nuestras terapistas, quien iniciará la terapia de Alisa desde este mismo momento!
Álvaro.- Creo que..Ha llegado el momento de la despedida Azucena, tienes que ser valiente, es un mes el que no estaremos con ella, pero después la podremos ver de nuevo muchas veces.
Azucena.- Creo que no lo puedo soportar, sé que esto parece ser tan exagerado, pero soy su madre, desde que nació me prometí ser su protectora, pelear por ella y cuidarla con uñas y dientes contra todo, Alisa estaba tan desprotegida, tan débil, era como si estuviera incompleta, tan frágil, como si fuera de cristal. Esperé durante nueve meses con mucha ilusión la llegada de mi bebé, pensé que sería fuerte, sano, rebosante de alegría y salud, todo marchaba tan bien...pero de repente, luego de dar a luz, cuando pedí ver a mi niña, el médico se me acercó y con voz firme, pero nerviosa me dijo: .-Señora, su bebé es un bebé muy especial, ella es diferente, necesitará de todo sus tiempo, de todo su amor, de todos sus cuidados, pero le aseguro que es un verdadero regalo de Dios, es una niña con Síndrome de Dawn. Yo me quedé estupefacta, bloqueada ¿Había escuchado bien? ¿Sería la anestesia después del parto la que me hizo delirar? ¿Qué significaban realmente aquellas palabras? Lo único que recuerdo aquella noche, fue que voltee a ver a mi bebé y era hermosa, realmente, era hermosa...
Carmenza.- Hermana mía, ¡Sigue platicándonos tus sentimientos, eso te ayudará, pero no tienes de qué preocuparte, Alisa estará muy bien conmigo, eso te lo puedo asegurar!
YURÉCUARO MICHOACÁN:
Por el rumbo del Gollete, una Colonia cercana a las Vías del tren, se encuentran un joven a quien todos le apodan "Cocorovico" junto a su amiga "La Chulabella", ellos son de clase pobre y vienen del corte de tomate:
Cocorovico.- ¡Me siento feliz, pues hoy llega Jesús Obed, mi sobrino!
Chulabella.- ¿Tu sobrino el que es diferente y anda como despistado siempre?
Cocorovico.- Chulabella, él es un joven con capacidades diferentes, es muy inteligente y es tan noble.
Chulabella.- Pues ya quiero volverlo a ver, para comprobar si le ayudaron las clases o las medicinas que le dieron allá en Guadalajara. Así como a Alisa, quien se fue a México y ya la extraño un chorro, haber cómo le va con su tía Carmena, dicen que es bien mala...de doble cara o sea...hipócrita....
Pasan varios días y la familia de Azucena y Álvaro trata de reorganizarse. En realidad el trabajo les ayudará bastante. Azucena trabaja de maestra en un jardín de niños en el centro de Yurécuaro, llamado BINET. Mientras que Álvaro labora en el despacho contable de Felipe Huaracha. A ratos, su día se queda paralizado por el recuerdo de su joven Alisa. Unos jóvenes que vienen del campo, del corte de tomate, Cocorovico y Chulabella, platican acerca de Alisa, quien está en México, donde recibirá terapia para volver a caminar, y también comentan acerca de Jesús Obed, quien es un joven especial. Chulabella está preocupada por el bienestar de Alisa, pues se quedó en manos de su tía Carmenza, quien se ha ganado la fama de ser una mala mujer.
CD. DE MÉXICO:
La realidad es muy diferente. Carmenza ha cambiado mucho y ahora es muy diferente a como muchos creen, ya en casa, trata con mucho cuidado y ternura a la jovencita Alisa:
Carmenza.- Alisa, ¡Me siento feliz de tenerte en casa conmigo! Tengo ahora la oportunidad de demostrarles a todos que ya no soy la misma de antes, la mujer amargada, triste por no saber qué hacer con su vida, por ser solo una solterona, delicada, dedicada solo a criticar a los demás. Ahora, mi vida ha cambiado y tú vas a hacer parte de mi cambio, yo te voy a cuidar como si fueras mi hija,¡¡Desde hoy eres mi hija Alisa!
Alisa cree en las palabras de su tía, en el fondo de su corazón, ¡Cómo anhela poder hablar con fluidéz y gritar a todo mundo que es realmente una niña normal, que comprende todo lo que sucede a su alrededor, que siente amor, que sufre ante las injusticias, que se equivoca, pero que también sabe perdonar. Solo que su cuerpo y su mente actúan con más lentitud que los demás.
Yurécuaro Mich.
Azucena y Álvaro, los padres de Alisa sienten la casa tan vacía, tan callada, pero saben que hasta cierto punto es normal, no están completos, tienen que ser fuertes:
Azucena.- ¡Creo que será más difícil de lo que creí, pero te pido que me tengas paciencia Álvaro! Si me ves llorando o pensativa, comprende que estoy luchando por vivir sin mi hija, aunque sea temporalmente.
Álvaro.- Aunque me ves fuerte, debes saber que como padre yo también sufro. ¿Recuerdas cuando Alisa nació y la vi por primera vez? Ya no quise despegarme de ella nunca más, hicimos al instante una conexión imposible de romper, era mi hija, mi sangre, la mitad de mi vida, era mi niña perfecta. Muchas personas me decían si no temía las burlas de la gente. ¿Burlarse de qué? ¿De ser un ser inocente? ¿Acaso Alisa pidió ser así? ¿Es ella culpable? Nadie tiene derecho a burlarse de una gran personita, fina, sentimental y muy inteligente, ¡Cuánta gente desearía ser en el fondo así, sin malicia, sin el estiércol mental de la corrupción que poseen muchos que se dicen son cultos y educados y en el fondo actúan peor que los mismos animales feroces! El mundo está agonizando, es ilógico, pero se necesitan personas "especiales" es decir, que nos enseñen a apreciar las cosas simples de la vida que son sin duda las más bellas.
En eso llega la vecina, una mujer de edad a quienes todos llaman "Nana Corazón" por la dulzura que contagia:
Nana Corazón.- ¡Azucena, Álvaro! ¿Cómo se encuentran?
Azucena.- ¡Nana Corazón, cuánta falta me hace platicar contigo! (llorando)
Nana Corazón.- Pues ya llegué para que vacíes tu corazón y saques tus sentimientos, saben, el mundo continúa de pie aún, me alegra saber que Alisa es libre de ustedes, pero ustedes son prisioneros de sus propias inseguridades, necesitan dejar volar a su hija, ella será más fuerte e independiente, aquí los débiles y frágiles son ustedes.
Álvaro.- ¿Hablas en serio Nana Corazón o lo dices solo para darnos valor?
Nana Corazón.-En los pueblos, no es tan común que los hijos se separen tan pronto de sus padres, pero a veces es necesario, la verdad Alisa no se fue solo por un mes, pueden pasar hasta años antes de que regrese y ustedes en el fondo lo saben, ese es su dolor verdadero. Imaginen cuando la vean caminando y hablando mejor, ustedes se sentirán tan orgullosos de ella y sabrán que ha valido la pena soportar el sufrimiento de la ausencia. Acabo de ver a Jesús Obed, el jovencito que es de la edad de Alisa, ya vive en Yurécuaro nuevamente, pero sufrirá mucho a manos de don Chabuelo, su padre, quien es alcohólico, ¡Ese sí es un verdadero problema! ¡Cómo urge un Centro para niños especiales donde se les pueda atender con el amor y el cuidado que tanto merecen! ¡En Yurécuaro lo podemos lograr con la cooperación de todos! Pero insisto, los retrasados mentales, los que tienen Síndrome de Egoísmo, somos todos los que actuamos con indiferencia ante el dolor que nos rodea, nosotros somos

Por otro lado, Carmenza llega con Alisa a la Central de Autobuses de La Piedad Michoacán, algo muy grave ha ocurrido y están de nuevo en Michoacán. Allí conversan con Leonel Adrián Pérez Arias, quien trabaja en la Central:
Leonel.- ¿Vienen o van de viaje? ¿Necesitan boletos?
Carmenza.- Venimos de la Cd. de México y vamos hacia Yurécuaro joven, solo que tengo una pregunta: ¿Qué acaba de suceder en La Piedad que todas las personas están tan alteradas, como asustadas por algo?
Leonel.- Fue un suceso relacionado con la violencia, es que ha aumentado tanto últimamente, pero de algo podemos estar seguros, si tomamos nuestras precauciones, reduciremos el peligro expuesto.
Carmenza.- Antes, se decía que la Cd. de México era un lugar muy violento y que la provincia era tan tranquila, pero los tiempos han cambiado mucho verdad, y ya ningún lugar es seguro. Solo Dios puede poner orden.
Leonel.- ¿Van a tomar un taxi?
Carmenza.- Lo más seguro es que sí, ya que mis familiares de Yurécuaro no saben que estamos mi sobrina y yo en La Piedad. Ella es Alisa, es tan especial.
Leonel.- Se ve en su mirada una alegría única, es muy bonita la verdad.
Carmenza.- Pues nos vamos, ¡Gracias por su amabilidad joven!
Leonel.- De nada, ya saben cuando vengan a la Central, aquí tienen un amigo para servirles.
Carmenza y Alisa toman un taxi, mientras llueve tranquilamente en La Piedad, en esa ciudad confundida, preocupada.
Mientras tanto en Yurécuaro, En el parquecito de La Estación, entre columpios y resbaladillas se encuentran Cocorovico y la Chulabella, quienes han sacado a pasear a Jesús Obed el jovencito especial:
Cocorovico.- ¿Jesús Obed te gusta subirte a los columpios?
Jesús Obed.- mu..cho.
Chulabella.- Pero no le des con tanta fuerza, lo puedes lanzar al vacío Cocorovico...
Cocorovico.- Ni que le diera tan fuerte, solo es a la velocidad de la luz...
Chulabella.- Oye ¿Tuviste dificultades para que don Chabuelo el papá de Jesús Obed te diera permiso para traerlo?
Cocorovico.- No... Ningún problema, el señor estaba bien dormidote y ni cuenta se dio cuando lo saqué...cuando se despierte, será el verdadero problema eh...
Chulabella.- Cocorovico... siempre resulta la resultadera contigo, no tienes juicio, ni remedio.
Cocorovico.- Sabes, me quedé pensando en algo sospechoso, cuando venía con Jesús Obed y pasamos por el lugar al que le llamamos "El jacalón de los mangos" en la casota retebonita donde dicen que vive un escritor y sus eposa, estaban ellos dos desde el balcón observando a Jesús Obed, y platicaban entre ellos, para mí que lo quieren secuestrar...
Chulabella.- No seas loquito, ese matrimonio es un amor, yo los conozco poquito, ella es la señora Florinda y su esposo es don Roberto Gómez, dizque un actor cómico retirado, super bien famoso, ya tienen dos años viviendo en esa casota y casi no se dejan ver, lo que me platicaron es que don Roberto está escribiendo un libro y se concentra en ese lugar rodeado de las huertas de mangos deliciosos de Yurécuaro...
En eso, ven que pasa un taxi y reconocen a Alisa:
Chulabella.- Cocorovico ¿Viste lo que yo divisé? ¡Es Alisa, pero qué hace aquí, debería estar en la Cd. de México!
Cocorovico.- Sí la vi y lo mismo digo yo...lo que me gusta es que por fin, Jesús Obed y Alisa se van a conocer y serán grandes amigos y de eso nos encargaremos nosotros... CONTINUARÁ.